Con la llegada de la primavera no sólo es necesario hacer un cambio de armario, sino que también en nuestra propia casa podemos llevar a cabo un serie de medidos que pueden resultar muy beneficiosas para ahorrar energía.
Pese a que puede haber excepciones, por lo general en esta época las temperaturas comienzan a subir, por lo que podremos bajar la temperatura de nuestro termostato, ayudándonos así a reducir el consumo de calefacción.
A continuación te damos algunos consejos de cara a estos meses primaverales:
1) El sol, tu gran aliado:En los días templados, permitir que el sol entre en casa puede ayudarnos a conseguir una temperatura agradable sin necesidad de encender la calefacción. Eso sí, para conseguir aprovechar la máxima energía de éste, corre las cortinas y deja las persianas levantadas.
En caso contrario, que sea un día de calor, es conveniente que utilices los toldos, cortinas y persianas.
2) Que no se te vaya la mano con el termostato: recuerda que cada grado que bajes puedes ahorrar hasta un 7% de energía, lo que supone una reducción importante de la factura. Por ello, si ves que empieza a hacer buen tiempo, lo mejor es que dejes el termostato en el mínimo.
3) Ya no necesitas agua tan caliente para ducharte: Al subir la temperatura exterior ya no es necesario que el agua salga tan caliente. Puedes bajar el termostato hasta un máximo de 50ºC. También es recomendable dejar los grifos en posición de agua fría para que no se te olvide.
4) Pon a punto el aire acondicionado. Puede que todavía tengan que pasar unas semanas hasta que lo necesites, pero para tenerlo preparado y que pueda rendir al máximo, es conveniente que limpies los filtros o los reemplaces en caso de que fuera necesario. En caso contrario, gastaremos más energía para enfriar lo mismo.