A muchas comunidades de propietarios con calefacción comunitaria les llega la hora de cambiar su antigua caldera a una caldera de gas. Si hasta ahora venían utilizando gasoil como combustible, en muchos casos deciden aprovechar este proceso para instalar una caldera de gas. ¿Cuál es la razón de este cambio?
Ventajas de las calderas de gas
Frente al gasoil, el gas natural presenta diversas ventajas:
- Es un combustible menos contaminante. Después de extraerse de la naturaleza, el gas natural prácticamente se utiliza en el punto de consumo habiendo experimentado escasas transformaciones químicas.
- Su rendimiento energético es superior al de cualquier fuente de combustible, lo que contribuye a que sea necesario consumir un menor volumen de combustible. Este hecho, añadido a la expansión de su comercio y a la extensión de las redes y sistemas de distribución, hace que su utilización esté aumentando en todo el mundo.
- Las calderas de gas son altamente seguras. Según el RITE (Reglamento de las Instalaciones Térmicas de Edificios), el titular o usuario de la instalación está obligado a contratar un servicio cualificado de mantenimiento correctivo y preventivo que garantice el funcionamiento y seguridad de la instalación.
¿Existen desventajas de las calderas de gas?
A pesar de que, en comparación con otros combustibles fósiles como el carbón o el gasoil, las calderas de gas son menos contaminantes por presentar un mayor rendimiento, no se trata de una energía renovable.
Las energías renovables son aquellas que, tras ser utilizadas, se pueden regenerar, ya que aprovechan recursos naturales, por lo que también se las conoce como energías limpias.
Son consideradas energías renovables la energía mareomotriz (mareas), la energía hidráulica (embalses), la energía eólica (viento), la energía solar y la energía de la biomasa (vegetación), etc.
Actualmente existen sistemas de calefacción basados en energías renovables como la geotermia (calor de la corteza terrestre) o la biomasa.
Remica Servicios Energéticos tiene también experiencia en este tipo de sistemas de calefacción. Un buen ejemplo de ello es el proyecto que acometió esta compañía en Albacete, donde se instalaron calderas de biomasa para dar servicio de calefacción y agua caliente a un emblemático edificio de viviendas.
En este proyecto, los antiguos equipos (dos calderas de gasóleo de 1.250.000 Kcal y 209.000 Kcal) se sustituyeron por dos calderas de biomasa de 300 y 500 kW respectivamente que utilizan como combustible pellets para satisfacer las necesidades de calefacción y agua caliente sanitaria de toda la comunidad de vecinos.
Con ello se logró reducir en torno a un 40% la factura energética al tiempo que aumentó la eficiencia energética de la instalación.
Algunos casos de éxito
No obstante, las calderas de gas, especialmente si son calderas de condensación, presentan una alta eficiencia energética, por lo que se consideran una alternativa más ‘sostenible’ en comparación con otro tipo de calderas.
Las cifras hablan por sí mismas: en 2016 Remica Servicios Energéticos elaboró un estudio basado en datos de ahorro de las instalaciones que gestiona; unos ahorros certificados por la entidad independiente TÜV Rheinland durante las dos últimas temporadas de calefacción (2013/14 y 2014/15).
El estudio probó el éxito de ahorros obtenidos en aquellas comunidades de propietarios con sistema de calefacción central en columna que cambiaron sus viejas calderas por calderas de gas de condensación e individualizaron su calefacción (instalando válvulas termostáticas y repartidores de costes).
Las comunidades obtuvieron grandes beneficios:
- De media, los ahorros energéticos anuales fueron superiores al 40%.
- Aunque el primer año los ahorros energéticos fueron notables, en el segundo ejercicio de calefacción aumentaron a pesar de que el invierno había sido más cálido.
Más información en Instalaciones de calefacción central con ahorros energéticos certificados de más del 40%.
¿Cuándo usarlas?
Para decidir si a una comunidad le compensa instalar una caldera de gas, o conviene más optar por otro tipo de equipo, lo mejor es que consulte con una empresa experta en instalaciones térmicas.
Tras realizar un análisis del estado de la instalación, deberá realizar un diagnóstico y proponer los cambios que consideren oportunos en función de cómo sean las características propias del edificio.
En Remica Servicios Energéticos contamos con más de tres décadas de experiencia en el sector de las instalaciones térmicas, tanto en la instalación, como en el mantenimiento preventivo y correctivo y en la gestión energética.
¿Hablamos? Puede contactar con Remica en el teléfono 91 396 03 00 o en el email remica@remica.es
Hace un par de anos nosotros tuvimos que buscar un modo de mejorar la climatizacion de nuestra casa porque donde vivimos en invierno hace mucho frio. Buscamos en diferentes comercios y no sabiamos que hacer, hasta que un vecino nos recomendo unos profesionales que nos hicieron un estudio pormenorizado de nuestro caso y asi darnos una solucion adecuada a nuestras necesidades.